El IPC cerró el año 2020 en el -0,5%, según los datos del INE. La inflación no se situaba en negativo desde 2014.
Aunque el precio de la luz se desplomó durante los tres meses del confinamiento, en diciembre cerró con su precio más alto de todo el año.
En 2020 lo que más subió de precio fue la joyería y bisutería (14%); los accesorios informáticos (10,3%); el transporte marítimo de pasajeros (8,7%) y la electricidad (5,9%).
Lo que más bajó fueron los combustibles líquidos (-25,1%); los hoteles y hostales (-18,3%); los vuelos internacionales (-17,3%); el gasóleo (-12,4%), y el gas natural (-11,8%).
Este IPC negativo de 2020 ha permitido a los salarios ganar más de dos puntos de poder adquisitivo.
Canarias, con un 0,1%, fue la región donde menos descendieron los precios el año pasado.
En tasa mensual (diciembre sobre noviembre), el IPC subió un 0,2%.