El Gobierno ha propuesto en las negociaciones de la mesa de modernización del mercado de trabajo que el número de contratos temporales no supere el 15% en cualquier empresa.
El objetivo es combatir la precariedad laboral, reduciendo un índice que ahora mismo es del 25%.
El Ministerio de Trabajo propone también que las ETTs permitan encajar los trabajos de temporada con una mejor protección a través de la contratación indefinida en las propias firmas.
En cuanto a los contratos formativos, la propuesta es concertarlos por un periodo de entre tres meses hasta un año como máximo para las personas que hayan finalizado sus estudios dentro de un plazo máximo de tres años.