España carece de gobierno desde hace nueve meses y, si finalmente hay terceras elecciones, su formación nos llevaría hasta bien entrado 2017.
Los efectos de este singobierno se han dejado sentir en la economía (la obra pública acumula una caída del 40% en Canarias) aunque el impacto ha sido menor del esperado. Canarias mantiene un buena inercia gracias al tirón turístico.
Sin embargo, las buenas cifras podrían haber sido aún mejores con un gobierno. La inestabilidad política ha costado la creación de 5.000 empleos. En 2017, los presupuestos prorrogados y el recorte de inversiones y suspensión de convenios, empeorarán la situación.