El Congreso de los Diputados aprobó ayer el plan de 11.000 millones de euros en ayudas a empresas y autónomos para transferencias directas, recapitalizaciones y reestructuraciones de deuda tras la crisis económica ocasionada por la COVID-19.
La oposición y parte de los propios socios de gobierno rechazaron el plan, criticando que llega tarde y es insuficiente.
Canarias espera recibir más de mil millones para los distintos sectores.
Del presupuesto total, 7.000 millones serán para ayudas directas, 2.000 exclusivamente para Canarias y Baleares por el peso del turismo.
Los 5.000 millones restantes se distribuirán entre el resto de comunidades y Ceuta y Melilla. Los criterios para el reparto irán en función de la caída del PIB, tasa de desempleo y paro juvenil.