El Consejo de Gobierno dejó ayer sin aprobar el decreto de ayudas del Estado de 1.144 millones. El Ejecutivo busca reducir los trámites lo máximo posible y simplificar la documentación para agilizar los pagos, que tienen que abonarse antes de finalizar el año.

En el plazo para las ayudas autonómicas hubo bastantes quejas por la excesiva documentación a presentar, lo que ralentizó el proceso.

Ahora se ha marcado el objetivo de llegar al máximo de empresas posible y que sea más sencilla la tramitación.

La intención es aprobar el decreto la próxima semana.