El Gobierno central aprobará el 11 de octubre un real decreto con 13 medidas de choque, por valor de 300 millones de euros, para hacer frente a la quiebra de Thomas Cook.
Dichas medidas están centradas en Canarias y Baleares, que obtendrán una rebaja de las tarifas de pasajeros y de ruta en los vuelos. Se espera así suavizar el impacto en el empleo, pues la quiebra del turoperador ha afectado a 3.400 trabajadores de forma directa, pero podrían ser muchos más.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo en funciones, Reyes Maroto, explicó que el plan está enfocado en cuatro puntos fundamentales: asegurar la conectividad aérea, paliar el impacto económico en el sector empresarial por la falta de liquidez, el mantenimiento del empleo y recuperar la demanda turística. Se sumará también una estrategia jurídica por parte del Estado para defender a los afectados y consumidores.
El plan incluye la apertura de una línea de crédito de hasta 200 millones de euros para tratar de compensar las pérdidas de empresas, pymes y autónomos.
Por su parte, Aena aplicará un incentivo comercial a las aerolíneas que programen asientos adicionales en estos dos destinos. La tarifa de pasajero se anulará para todas las aerolíneas que operen en Canarias y Baleares durante la temporada de invierno, reduciendo el coste de escala un 38%.
En materia de empleo se ampliarán las bonificaciones del 50% en las cotizaciones de la Seguridad Social en los contratos fijos discontinuos en los meses de octubre y diciembre.
Para la recuperación de la demanda turística se prevé un programa de promoción en todos los mercados donde operaba Thomas Cook, en especial el británico.