La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, comentó ayer que pretende convertir en «una norma estructural» lo vivido en esta pandemia. Por eso los ERTE podrían quedarse para siempre como parte de la reforma laboral que se ha presentado en Bruselas.
Así, las empresas con problemas económicos o productivos podrán acudir a un mecanismo más flexible en lugar de despedir directamente.