La actual campaña de rebajas ha sufrido una caída media de las ventas de entre el 25% y el 30%, unas cifras peores de lo previsto.
La menor actividad social, el ahorro de los hogares y la baja presencia de turistas son las principales causas.
Al arrancar la rebajas había unas perspectivas más altas por el gran volumen de mercancía en promoción. Había que dar salida al gran stock acumulado durante el confinamiento. Pero no ha funcionado. El sector comercial ya da por mala la campaña a tres semanas de terminar.
La incertidumbre económica provocada por la crisis del coronavirus ha recortado el consumo. Canarias registró en junio la segunda mayor caída de las ventas minoristas del país, con un descenso del 11,9% interanual.
Dando por perdidas las rebajas, ahora las esperanzas están puestas en las campañas del black friday y Navidad.