Canarias es una de las comunidades donde más han bajado las ventas de la hostelería, acumulando desde enero hasta septiembre un descenso del 56%. Solo Baleares y Cataluña le superan, según los datos del Anuario de Hostelería de España.
El sector espera cerrar el año con unas pérdidas de facturación de 67.000 millones de euros, la mitad del pasado ejercicio. Durante los meses de abril y mayo, la facturación llegó a caer por encima del 90%.
Además, se destruirán más de 1,1 millones de empleos. 400.000 de ellos se esfumaron al inicio de la pandemia y 900.000 se tuvieron que acoger a un ERTE.
En 2019 había 315.000 establecimientos en el sector hostelero. Si no se prorrogan los ERTE, en febrero podrían haber desaparecido 100.000 de estos negocios.