Canarias cerró el ejercicio 2017 con más gastos en prestaciones y subsidios que ingresos por cotizaciones sociales. La diferencia entre los ingresos del sistema público de pensiones en 2017 en las islas y el gasto en las pagas de los trabajadores ascendió exactamente a 404,7 millones de euros.
En resumen, el dinero que los trabajadores y las empresas isleñas ingresasn a lo largo del año en las cuentas de la Seguridad Social no alcanza para sufragar las pensiones. Además, esas prestaciones subirán a partir de ahora un 1,6%.
Los números rojos en el conjunto nacional ascienden a 18.000 millones de euros.
En el caso de Canarias, el montante destinado al pago de las pensiones de jubilación y demás prestaciones nunca había superado la recaudación por cotizaciones de empresarios y trabajadores hasta el año 2016, cuando se constataron alrededor de 140 millones de desfase.
Hasta ese momento, el Archipiélago era de las pocas comunidades autónomas en las que el superávit del sistema servía para cubrir el déficit de otros territorios. No obstante, esa condición se alcanzaba gracias a las bajas pensiones que se pagan en las Islas.
Los empresarios y empleados canarios ingresaron durante 2017 en la cuenta corriente de la Seguridad Social poco más de 3.137,6 millones de euros. El desembolso en prestaciones contributivas llegó a 3.374,1 millones, a los que hay que sumar 168,2 millones en forma de subsidios y otras prestaciones no contributivas.