El presidente de la comisión de seguridad de la patronal turística (FEHT), Tom Smulders, cree que la aplicación de la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, la ley mordaza, permitirá a través de sus duras sanciones al consumo de bebidas en la vía pública, erradicar este verano el botellón de la zona turística del Sur.

«El botellón molesta y practicarlo dolerá en el bolsillo de los infractores, porque la nueva normativa estipula sanciones de 100 a 600 euros para quienes la incumplan», señaló el dirigente empresarial. «Ya no hay razón o motivo para pasar de largo y no actuar».

Smulders también se ha pronunciado sobre los problemas de aparcamientos que se generan todos los fines de semana, por lo que propone iniciar una campaña de  concienciación para que los visitantes temporales utilicen el transporte público antes que el propio vehículo. Según él, utilizando la guagua el beneficio sería múltiple. Se resuelve la falta de aparcamientos, el usuario estará  seguro de que no le multarán y disfrutará de más tiempo.