Un estudio sobre crisis económica, confianza y capital social, elaborado por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), desvela que la desconfianza y la falta de disposición a cooperar podrían ralentizar la recuperación económica de España.
La crisis económica ha disminuido gravemente la confianza de la sociedad, de forma que el capital social se ha destruido en tasas superiores al 20%, siendo España el país de la OCDE donde esta caída ha sido más intensa entre 2007 y 2011.
Se ha incrementado la desconfianza en los representantes políticos, en el parlamento y en el sistema legal. Por contra, se ha mantenido en la gente en general o en las instituciones de orden público, al tiempo que ha aumentado el trabajo voluntario en organizaciones y la participación cívica.
Sigue existiendo disposición de los individuos a cooperar, aunque solo en algunas direcciones.
La reducción del capital social ha sido significativa en todas las comunidades autónomas, dándose la menor en Ceuta, Melilla, País Vasco y Asturias, y la mayor en Canarias, Murcia, Castilla-La Mancha, La Rioja y Comunidad Valenciana.