La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, avanzó ayer que se gravará con un 3% los ingresos por publicidad, venta de datos y transacciones entre particulares y comercio de las grandes tecnológicas.
El impuesto digital iría dirigido al negocio de la compra, la hostelería y de algunos transportes, y afectaría a las compañías con una facturación superior a 750 millones de euros en todo el mundo y 3 millones en España.
Otro de los cambios impositivos del proyecto presupuestario de 2019 será un tipo efectivo mínimo para grandes empresas del 15%, 18% en el caso de banca y petroleras.
Por su parte, se bajará el IVA a los productos de higiene íntima femenina, del 10% al 4%.
En cuanto a la tributación por sucesiones y donaciones, el objetivo es homogeneizar el impuesto.