El Fondo Monetario Internacional no descarta que el PIB español crezca un 3,1% este año tras cuatro ejercicios de crecimiento económico y creación de empleo. Eso sí, será difícil mantener a medio plazo ese ritmo si no se reduce la deuda pública y la tasa de paro.

El análisis del FMI concluye que en estos cuatro años el PIB es ya muy superior a los niveles anteriores a la crisis, con tasas de crecimiento muy por encima de la zona euro. Las reformas han convertido a España un país más flexible, competitivo y resistente, con un sector servicios muy dinámico. Se ha reducido el endeudamiento de familias y empresas y el sector bancario es más fuerte.

No obstante, la elevada deuda pública y una tasa de paro estructural muy alta, invitan a seguir con las reformas.