Los ganaderos canarios siguen denunciando que las ayudas del REA sirven para cubrir un porcentaje de sus gastos, pero también reducen el precio de productos de fuera con los que tienen que competir.
Este problema no es nuevo pero ahora la situación es mucho más delicada por la inflación. Además de los combustibles y la electricidad, el forraje y los piensos para los animales han aumentado su precio un 50%.
El sector reclama cambiar el sistema de reparto del REA, aumentando un 20% las partidas para alimentación de los animales.
El Gobierno de Canarias está dispuesto, pero a condición de rebajar la cantidad de kilos subvencionables. Además, el Ejecutivo también pretende elevar en el mismo porcentaje los productos competidores.
Los ganaderos ven en este reparto una clara situación de competencia desleal, que favorece a porductos industriales frente a la ganadería local.