El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, anunció ayer que el Gobierno aplazará el pago del IGIC a las empresas afectadas por la crisis del coronavirus. Además, señaló que se estudia adoptar otras iniciativas que garanticen el mantenimiento de los puestos de trabajo, como los expedientes de regulación de empleo temporales (ERTE) y las reducciones de jornada en el sector turístico.
Torres apeló a «la responsabilidad individual» de los canarios para detener el avance del número de infectados. Se mostró convencido de que así se superará la situación. Pero para entonces los daños a la economía ya habrán sido grandes. El Gobierno se reunió ayer para trazar un plan de contingencia que se conocerá con detalle la próxima semana.
Madrid ya ha anunciado que adelantará 2.800 millones de euros a las comunidades autónomas.
Lo que sí se conoce seguro es que las empresas afectadas no tendrán que liquidar el IGIC en el plazo ordinario; se aplazará el pago.
También se estudia aplicar ERTEs al turismo con apoyo del sector público y reducciones de la jornada laboral.
Torres cuenta con que Madrid, con el visto bueno de Bruselas, permita a las comunidades con superávit utilizar ese dinero para contar con más recursos sanitarios.