El bono turístico que puso en marcha la Consejeria de Turismo ha generado una actividad de 20,8 millones de euros en el sector turístico de Canarias, según explicó ayer la consejera de Turismo, Yaiza Castilla.
«Esta iniciativa ha resultado esencial para fomentar las vacaciones de los residentes, así como para incrementar su estancia y aumentar el gasto previsto inicialmente en alojamientos y agencias de viajes», dijo Castilla.
Según una encuesta de satisfacción del departamento de Investigación de Turismo, el bono modificó las condiciones de viaje del 85% de los beneficiarios. La mitad de ellos no hubiesen disfrutado de sus vacaciones sin estos 200 euros adicionales.
Otro 20% de los encuestados pudieron alargar su estancia gracias al bono.
Por cada euro aportado por la Consejería con esta iniciativa, los residentes gastaron 1,67 euros. El gasto medio por bono ascendió a 533 euros.
Ayer finalizó el plazo límite para canjear estas tarjetas regalo, salvo para los que adquirieron sus vacaciones mediante agencias de viaje, cuyo plazo acaba el 31 de diciembre.
1.176 establecimientos se adhirieron a esta iniciativa. Turismo emitió 42.773 tarjeta regalo de las que se activaron 39.102.
Se han movido 11 millones de euros, de los que 7,8 han sido aportados por Turismo y el resto por los residentes.