La compañía aérea Binter, por medio de su presidente, Agustín del Castillo, anunció ayer que mantiene negociaciones para convertir su base en Canarias en el centro homologado de atención de aviones del fabricante italo-francés ATR para África.
El objetivo es convertir al Archipiélago en el centro de mantenimiento aeronáutico para las zonas de influencia más cercanas del continente vecino, lo que aportaría muchos beneficios a la economía de las Islas, crearía más puestos de trabajo especializados y contribuiría a la diversificación de la economía.
El traslado de las instalaciones de Sati (Servicios Aerotécnicos Insulares) desde El Goro al hangar de 1.750 metros cuadrados en el aeropuerto de Gran Canaria, es una de las actuaciones dentro de la estrategia de la aerolínea para liderar el desarrollo de la industria aeronáutica en las Islas.
La empresa, que emplea a 249 especialistas y facturó dos millones de euros en 2014, tiene como objetivo duplicar esta cifra durante 2015, para así consolidarse como una de las más importantes en el sector de la alta tecnología.
