El bajón de la recaudación por los tributos del RFE se aceleró en noviembre, fundamentalmente por la falta de turistas.

El IGIC, el tributo que grava el consumo, es la principal fuente de ingresos del Bloque de Financiación Canario. Ahora mismo, los niveles de consumo se han reducido enormemente. El gasto de los turistas está casi en cero, pero tampoco los residentes están en condiciones de gastar.

Así, la merma por recaudación del REF supera los 320 millones de euros, de los que hasta 318 se han perdido por IGIC.

La Agencia Tributaria Canaria cifra estos ingresos de enero a noviembre en 1.295,3 millones de euros. En el mismo periodo del año pasado habían sido  1.615,9 millones, un 20% más.

Y falta el último mes del año, en el que las nuevas restricciones impuestas harán que el agujero crezca.

La Confederación Canaria de Empresarios (CCE) ya advierte: “Sin ayudas, las empresas acabarán en un punto de no retorno”.

El desplome de la recaudación se había moderado desde junio, pero en noviembre, cuando normalmente se inicia una temporada alta que este año no ha existido, los ingresos de la Hacienda regional volvieron a hundirse.

Además del IGIC, el Impuesto de Matriculación ha dejado 12,9 millones de euros hasta noviembre, 7,8 millones menos.

El AIEM, excepcionalmente, ha sumado, 5,1 millones más que el año pasado.

El Impuesto sobre Sociedades ha caído un 39,2%.