Las ventas del comercio en Canarias siguen creciendo en general, según el análisis de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, de cuyos datos se extrae que las ventas aumentaron un 1,7% en el segundo trimestre de este año respecto al mismo periodo de 2018 y que el empleo lo hizo un 1,1%.

Sin embargo, este creciemiento es cada vez más desequilibrado, con una creciente concentración en las grandes empresas y la consecuentente pérdida de rentabilidad para las pequeñas.

Además, el número de establecimientos comerciales con algún trabajador a cargo descendió un 2,3% y se encuentra en niveles de 2013.

Las pymes están siendo perjudicadas por esta situación, al tener mayores dificultades para adaptarse a los continuos cambios del sector, en especial los relacionados con la digitalización y el comercio electrónico. También sufren ante las constantes promociones y campañas de descuentos, generalemente promovidas por las grandes compañías. Su rentabilidad cae, y esto acabará afectando al empleo.

La Cámara tinerfeña solicita un plan integral de actuación con medidas específicas según las diferentes zonas y tipologías de productos y empresas. Debe existir colaboración entre las administraciones públicas y los agentes privados.