Las franquicias canarias siguen sin despegar pese a la recuperación económica de los últimos años. Los problemas de aduanas, las trabas administrativas y las complicaciones de logística y transporte siguen siendo un gran obstáculo para esta modalidad, que sí que crece en el resto del país.

En 2018 se contabilizaban diez centrales franquiciadoras en las islas, una menos que el año anterior. Facturaron 27,6 millones de euros, un 1,4% menos que en 2017.

Estas diez firmas canarias sumaron 167 locales en toda España, siete menos que en el año anterior, y emplearon a 424 personas.

Canarias sigue a la cola nacional en el desarrollo de las franquicias, ya que sus entidades representan solo el 0,7% del total de 1.376 que conforman actualmente el sistema en España.

Frente al retroceso en las islas, las franquicias volvieron a crecer a nivel estatal por quinto año consecutivo, con una facturación a cierre de 2018 de 27.707,2 millones de euros, un 0,4% más interanual. El número de establecimientos creció un 4%, hasta un total de 77.397 locales. El empleo creció un 5,3%, con 293.872 personas en total.

Desde 2013, la red nacional de franquicias ha aumentado un 26%, mientras que en Canarias existe hoy en día el mismo número de centrales franquiciadoras que ese año. Lo que sí ha progresado en las islas es el volumen de ventas, casi un 70%.