El Gobierno central ha planteado que el horario de trabajo acabe a las 18:00 horas con carácter general, más cerca de Alemania o Reino Unido. Para ello buscará un Pacto de Estado para la conciliación y racionalización de horarios, estudiando también un posible cambio de huso horario.

El huso no se corresponde con la situación geográfica de la Península por una anomalía de la II Guerra Mundial que buscaba aprovechar al máximo la luz solar. Esto provoca que el país tenga la misma hora que Francia, Alemania e Italia y que no coincida con su hora solar. Sin embargo, un cambio en el huso de la Península podría motivar una pelea entre los gobiernos central y canario para defender esa diferencia que se ha convertido en marca turística.

Los horarios laborales de España, por lo general, van desde las 9:00 a las 14:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas. Dentro del contexto europeo, los españoles trabajan más tiempo y su productividad es menor, además de que los horarios impiden la conciliación de la vida laboral y personal.

La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, defendió ayer en el Congreso que «la jornada laboral en España acabe a las 18.00 horas» y utilizar fórmulas de conciliación «como el teletrabajo o la creación de una bolsa de horas para gestionar asuntos propios».

También se trabajará en la ampliación a cuatro semanas del permiso de paternidad y en una «tarjeta social» en la que figuren las prestaciones y rentas que reciben los ciudadanos de cualquier administración pública.