La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, aseguró ayer que el pequeño comercio tiene de margen hasta finales de este mes de agosto para adaptarse al real decreto ley para el ahorro del consumo energético.

A partir de mañana ya entran en vigor dos medidas: regular la temperatura en el interior de los establecimientos y apagar la luz de los escaparates a partir de las 10 de la noche.

Para finales de septiembre se contempla que los negocios tengan puertas y paneles automáticos para la mejora del ahorro energético. Esta es la medida que más controversia crea, pues es mucho más costosa.

El Gobierno ya ha dicho que no va a modificar la ley y que no busca sancionar con un afán recaudatorio, pero no ha especificado si habrá ayudas para acometer estas modificaciones.

Hasta el 31 de agosto se recibirán propuestas para presentar el plan definitivo en Bruselas.